miércoles, 20 de enero de 2010

EDITORIAL

Hay que estar al loro. Porque si no estamos al loro no sabemos lo que pasa. Y si no sabemos lo que pasa, no estamos al loro. ¿Ha quedado claro? Suponemos que no, pero nos da igual.

Es mejor no tratar de buscar sentido a lo que no lo tiene, porque si tratas de interpretar algo que no tiene explicación, puedes volverte majareta. Y si te vuelves majareta, no estarás al loro. Y estaremos como al principio, cosa que no queremos.

No. Porque lo que tratamos de hacer es ofrecerte otro punto de vista. Otra forma de ver las cosas. Fijarnos en lo que otros no se fijan. Prestar atención a todo aquello que otros ignoran. Porque si otros lo ignoran, no lo conocerás. Y si no lo conoces, no estarás al loro. Y, señoras y señores, hay que estar al loro. Hay que estar bien formados, informados y cultivados. Saber qué es lo que pasa por ahí.

Y... ¿qué es lo que pasa por ahí?

Pues no dejen de pasar por aquí, aunque sea de vez en cuando, y sabrán qué es lo que pasa 'por ahí'. Y estarán al loro. Porque hay que estar al loro.

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